Un proyecto universitario ha sido la clave para avanzar hacia la sostenibilidad en el sector de la arquitectura a través de casas sostenibles llamadas TO o casas prototipo. Este proyecto fue impulsado por alumnos de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC), y cinco de ellos vivirán en el prototipo de casa sostenible TO ubicado en el Campus de Diagonal-Besòs para comprobar su viabilidad como vivienda real. Algunos de los elementos a destacar de la casa son: cortinas hechas con edredones, un baño seco o un suelo que absorbe el agua y la lleva a un depósito donde se filtra para reutilizarla como agua gris.
Los estudiantes quieren comprobar que este tipo de viviendas sostenibles se pueden adaptar fácilmente a las personas en un entorno urbano. La puesta en marcha de estas casas sostenibles supondría generar menos impacto energético y contaminante para el medio ambiente. La idea ya fue premiada en el concurso universitario Solar Decathlon Europe 2019.
Cuando vida y sostenibilidad habitan el mismo espacio
Las casas prototipo se definen como aquellas que son capaces de proporcionar sostenibilidad a las personas que las habitan. Su principal función es respetar el medioambiente a través de nuevos hábitos de consumo. Además, las estructuras con las que se construyen son principalmente de materiales reciclables.
La característica principal de este tipo de viviendas es su ubicación. Las casas prototipo deben estar siempre colocadas en zonas de mucha exposición solar, ya que gran parte de su funcionamiento depende de la climatización pasiva para su correcto funcionamiento.
Entre otras de sus muchas características también encontramos:
- Disposición de placas solares: La creación de energías renovables es uno de los puntos clave para el funcionamiento de estas casas. La colocación de placas contribuye al ahorro energético. Se estima que las viviendas convencionales consumen un 29% de la energía mundial y contribuyen al 21% de las emisiones de CO2 resultantes.
- Aislamiento térmico: Otro de los puntos fuertes con los que cuentan las estructuras de estas casas es el aislamiento térmico, lo que contribuye a una mayor eficiencia energética. Se estima que este tipo de viviendas puede contribuir a un ahorro energético de hasta el 90%.
- Mobiliario ‘multi-tarea’: El mobiliario está pensado para adaptarse en todo momento a cualquier uso que se le quiera dar. De esta manera, se contribuye a un menor consumo y a minimizar la producción excesiva de productos.
- Reducción de la huella de carbono: Dado que están producidas de materiales reciclables, las emisiones de carbono que producen se reducen prácticamente a cero. Son casas que no tienen procesos contaminantes de destrucción, ya que los materiales se aprovechan.
La arquitectura sostenible: una apuesta segura para el planeta
El sector de la construcción deja alrededor del 40% de las emisiones de CO2 que se emiten a la atmósfera. Gran parte de ellas proceden de los procesos de demolición de viviendas o casas que quedan en desuso.
‘‘Si la población mundial llegase a alcanzar los 9600 millones de personas en 2050, se necesitaría el equivalente de casi tres planetas para proporcionar los recursos naturales precisos para mantener el estilo de vida actual’’.- Según informa el Gobierno de España.
En países como Noruega, Irlanda, Canadá o Brasil, la idea de patentar una arquitectura sostenible va más allá de las viviendas. Y sobre todo, trabaja para proteger los recursos del planeta. Noruega cuenta con espacios sostenibles públicos desde 2008, uno de los más relevantes: La Ópera de Noruega.
En países como Brasil, la prioridad es proteger sus recursos naturales. Es por ello que, desde 2014, el país trabaja en la creación de edificios que promuevan la eficiencia energética a partir de la introducción de luz natural en estos y la protección de sus países. El país fue nombrado Capital Mundial de la Arquitectura en 2020 por su compromiso medioambiental.
Anaïs Batanero