The Line, un proyecto urbanístico en pleno desierto

Captura sitio web The Line
Comenzó la construcción de una ciudad -bastante curiosa- en Arabia Saudita. Tendrá de todo, montañas, valles, pura innovación y diseño. El proyecto urbanístico, The Line, busca apostar por la sostenibilidad. ¿Lo logrará realmente? ¿Qué impacto ambiental tendrá?

Crear de cero una ciudad en pleno desierto no es nada nuevo. Ciudades como Dubai o Las Vegas son el perfecto ejemplo. Aun así, este nuevo proyecto busca innovar el concepto que ya tenemos de una ciudad. Para empezar tendrá una fachada de espejo exterior que permitirá que se mezcle con la naturaleza. Estará constituida por unos 200 metros de ancho y 170 Km de largo. 

No habrá coches, por ende tampoco carreteras. En consecuencia no habrá emisiones que incrementen la Crisis Climática. Según lo describen en el sitio oficial, el único vehículo de transporte será el público. Dónde se podrá recorrer la urbe en unos 20 minutos. El gobierno de Arabia Saudita asegura que funcionará 100% con energías renovables. Además el 95% de la tierra se conservará para la naturaleza. 

Otra característica de la urbe es que, dentro de ella, se disfrutará de 10º menos de temperatura que en el exterior. Aún no hay datos sobre cómo lograrán esto exactamente.

Sostenibilidad sí, pero ¿a qué costo?

El lugar elegido para construir The Line, ya era hogar de la Tribu Al- Huwaiti. Para poder llevar a cabo este proyecto el gobierno Saudí ha pedido que desalojen las tierras para poder edificar. Según la Organización de Derechos Humanos ALQST, tres hombres fueron desalojados por la fuerza y condenados a muerte a principios de octubre. 

Los hechos hablan por sí solos. El fin no justifica los medios. Todos los esfuerzos por cuidar a nuestro planeta son apreciados, pero todas las vidas valen. Tanto la salud del mundo como de cada persona, animal, insecto o ecosistema. 

Si bien la idea es muy innovadora en muchos aspectos, sobre todo de desarrollo sostenible; nos quedan muchas preguntas por responder: ¿quiénes tendrán acceso para vivir en ella? ¿Será nuevamente una loca idea para el disfrute de unos pocos?

Margarita Colombo Hiriart